La papa tiene un gran contenido de hidratos de carbono, principalmente almidón. Su contenido de proteína es similar al de los cereales, y es muy alto en comparación con otras raíces y tubérculos. La papa tiene poca grasa, abundantes micronutrientes. Contiene una cantidad moderada de hierro, pero el gran contenido de vitamina C fomenta la absorción de este mineral. Este tubérculo tiene vitaminas B1, B3 y B6, y otros minerales como potasio, fósforo y magnesio, así como folato, ácido pantoténico y riboflavina. También contiene antioxidantes alimentarios y tiene fibra, cuyo consumo es bueno para la salud.
Por sí misma, la papa no engorda (y la saciedad que produce su consumo puede en realidad ayudar a las personas a controlar su ingesta). Sin embargo, la preparación y consumo de las papas con ingredientes de gran contenido de grasa aumenta el valor calórico del plato.
Cocinar las papas con su cáscara evita que se pierdan sus nutrientes.
1 papa chica con cáscara (100 g)
Recordá que la recomendación de las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA) es consumir a diario 5 porciones de frutas y verduras en variedades de tipos y colores. Se recomiendan consumir al menos medio plato de verduras en almuerzo, y medio plato en la cena.
Conservar en lugar fresco y oscuro.
Lavar las verduras con agua segura antes de consumirlas y prepararlas, es fundamental.